Encontrarán a la pobre criatura temblando, agazapada en un rincón del patio, todavía en pijama y con una sola zapatilla. Perdió la otra al salir corriendo por la puerta trasera. Los vecinos dieron la voz de alarma al oír los gritos de terror de los chicos. Pero, cuando llegó la policía, ya era demasiado tarde para los hijos de la pareja de la casa. La mayor, la adolescente a cargo de llevar a la escuela a los pequeños cuando sus padres se marchaban a trabajar a primera hora, tenía un cuchillo de cocina clavado en la barriga. El niño yacía en el suelo, había sido golpeado con un objeto contundente en la cabeza. El muchacho acurrucado entre los árboles, dada la situación, alberga la esperanza de quedarse permanentemente con esta familia de acogida, ahora como hijo único. Solo tiene que poner cara triste, esconder el cenicero de mármol y limpiar esas gotas de sangre de entre sus dedos.
- Presentat a la proposta del Monstruoscopio de Esta noche te cuento, ronda 1, condicions: ha d’estar inspirat en aquesta imatge, incloure la paraula “criatura” i el títol ha de començar per M i acabar amb O.
PETITES HISTÒRIES 